¿Por qué tengo Diabetes Tipo 2 si estoy delgado?
May 26, 2025
Por el Dr. Víctor Bravo – Endocrinólogo y Educador en Diabetes
“Doctor, si yo no tengo sobrepeso, ¿por qué tengo diabetes?”
“Estoy más bien delgado... tirando a canijo. ¿Cómo puede ser?”
Te aseguro que esta es una de las preguntas que más escucho en consulta y en mis vídeos. Y si tú también te lo estás preguntando, este artículo es para ti.
Hoy te explico por qué puedes tener diabetes tipo 2 aunque estés delgado, y sobre todo, qué puedes hacer para revertirla sin obsesionarte con las calorías ni depender de pastillas para siempre.
La diabetes tipo 2 no es exclusiva de personas con obesidad
Muchas personas creen que la diabetes tipo 2 solo aparece cuando tienes sobrepeso u obesidad, pero eso es un mito peligroso. La realidad es más compleja y tiene que ver con cómo está funcionando tu cuerpo por dentro, no solo con lo que ves por fuera.
Hay personas delgadas, como quizás tú, que tienen:
- Poca masa muscular
- Mucha grasa visceral (esa que no se ve)
- Malos hábitos sostenidos durante años
Y ese combo, amigo o amiga, es tierra fértil para la diabetes tipo 2.
¿Qué pasa en tu cuerpo si no tienes músculo?
La masa muscular es el órgano más importante para gestionar la glucosa.
Es el que más glucosa absorbe cuando comes.
Si no tienes músculo, la glucosa no tiene a dónde ir, así que se queda en la sangre… y ahí empiezan los problemas.
Yo lo explico con esta frase:
“Sin músculo, la glucosa no tiene casa. Así que se queda de ocupa en tu sangre.”
Y eso, con el tiempo, genera resistencia a la insulina, inflamación y sí… diabetes tipo 2.
La metáfora del armario que explota
Imagina que tu cuerpo es como una casa con armarios para guardar grasa. Si tus armarios (tejido graso subcutáneo) están llenos, tu cuerpo empieza a meter esa grasa en otros sitios: el hígado, el páncreas, los músculos...
Y ahí empieza el caos. Es como si metieras la freidora en el armario del baño. Los órganos se saturan por esta grasa excesiva y dejan de funcionar bien.
A eso lo llamamos lipotoxicidad y es una de las principales causas de la diabetes tipo 2, incluso en personas delgadas.
“Doctor, es que mi padre era diabético. Será la genética, ¿no?
No. Puede influir de manera residual, pero claramente no es la causa del problema. Te lo puedo asegurar.
A pesar de que la diabetes tipo 2 tenga una gran asociación familiar, eso no quiere decir que tienes diabetes tipo 2 porque tus padres la presentaron.
A día de hoy sabemos que los malos hábitos se pegan como un chicle a la suela del zapato. La diabetes tipo 2 no es una enfermedad genética, es una enfermedad de hábitos sostenidos en el tiempo.
Y muchos de esos hábitos los aprendiste cuando eras pequeño de tus figuras de referencia y autoridad: tus padres.
Por lo tanto, que tu padre o tu madre la hayan tenido, significa que seguramente compartíais hábitos similares, no genes defectuosos.
Además, hay algo incluso más importante que la genética: la epigenética (más allá de la genética) ¿Sabías que nuestros hábitos del día a día pueden, literalmente, modificar nuestros genes? Esto se ha estudiado ampliamente en la obesidad y la diabetes tipo 2. Así que recuerda:
“Los genes cargan la pistola, pero el estilo de vida aprieta el gatillo.” Dr. George A. Bray.
Entonces… ¿cómo revierto la diabetes tipo 2 si estoy delgado?
Aquí viene la parte práctica. Si quieres revertir tu diabetes sin pastillas ni sufrimiento, tienes que vaciar esos “armarios” de grasa que están saturados. ¿Cómo lo haces?
1. Entrena fuerza (sí, aunque estés delgado)
Que estés delgado no quiere decir que no tengas grasa en exceso, probablemente la tengas y si te haces una ecografía abdominal quizá tengas hígado graso o tengas grasa en exceso en el peritoneo (la capa que cubre los intestinos). Además, seguramente también tengas poca masa muscular. Por lo tanto entrenarla te permitirá:
- Mejora la sensibilidad a la insulina
- Aumenta la masa muscular
- Disminuye la glucosa en sangre
2. Come de forma estructurada
Que estés delgado tampoco quiere decir que comas bien, simplemente quiere decir que comes poco o lo justo a nivel calórico, pero no necesariamente comes la cantidad de proteína, grasa, carbohidratos y verdura que tu cuerpo necesita. Por lo tanto lo que debes hacer es:
- Prioriza proteínas y verduras en cada comida
- Reduce alimentos ultraprocesados y azúcares simples, no hace falta prohibirlos para siempre pero sí reducir su consumo.
- No se trata de hacer dieta: se trata de aprender a comer bien y que sea un hábito que se mantenga para siempre.
3. Muévete todos los días
Camina, sube escaleras, haz pausas activas.
- No necesitas un gimnasio. Necesitas un plan y una estrategia a seguir cada día.
¿Y cuánto peso tengo que perder para mejorar?
Si tienes sobrepeso, se calcula que perder un 10-15% del peso corporal mejora drásticamente los niveles de glucosa según diferentes estudios. Pero, si ya estás delgado, tu objetivo no es perder peso, sino ganar músculo y vaciar grasa visceral.
La clave no está en el peso, sino en en quién te conviertes
La pregunta no es cuántos kilos tengo que perder, sino:
¿En qué persona me tengo que convertir para no volver a tener este problema nunca más?
Y la respuesta es esta:
- En alguien que cuida su alimentación
- Que se mueve a diario
- Que entrena su cuerpo
- Y que deja de buscar soluciones mágicas y empieza a aplicar soluciones reales
Puedes revertir la diabetes tipo 2, incluso si no tienes sobrepeso
No estás condenado. No eres “raro” por tener diabetes sin estar obeso. Lo que necesitas es entender el origen real del problema (grasa visceral, falta de músculo, malos hábitos crónicos) y ponerte en marcha con un plan claro y sostenible.
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Bibliografía: